lunes, 16 de febrero de 2009

··· Al Consorcio falta gente___ Jueves 12/02/09

Y les escribo desde mi nueva habitación. De espalda a la pared sentada en la cabecera de la cama, pasa un poco de aire por la ventana que me queda justo encima pero no lo suficiente para refrescarme el calor del desmaleteo.


Hoy amanecí pidiendo más horas al despertador. Café con leche, medio empaqueto y mientras estoy en la ducha tocan la bocina. ¡Qué puntual! Una que se acostumbra a la hra nica y se refía. Es Riman él tan puntual y cumplidor, dejo las maletas nohechas en la casa, durante la mañana vendré a por ellas. Casi salgo medio mojada sin secarme aún.


En el hospital Moisés no aparece en toda la mañana, luego me dirá que andaba con goma; mediotragedias personales. Así que aprovecho para hacer toda la documentación que me faltaba del proyecto. Ahora sólo falta el diario técnico con lo programado y lo realizado, nadie me lo ha pedido pero nunca está de más documentar. A la 1:00 teníamos la conferencia con los tsf allí en barna, y tras unos pocos intentos fallidos por Skype, nos llaman al fijo del hospital. Muy bien!


Comida en el bar del hospital con la doctora porque ya estaba cerrado el comedor. Y mientras Moi se pasa la tarde halando cable y acaba puntos más (trabajo social, farmacia y UCI) yo me voy al COnsrocio a ver mi nueva habitación. No está mal la verdad, una cama individual cómoda (lo parece, ya os lo diré más adelante), una mesita de noche, un gran armario de madera y un sucedáneo de armario empotrado sin puertas cuyo fondo, de hecho, es el pladur de la pared de la habitación de al lado. Lo malo, el baño, bueno el sanitario en si está bien, pero la ducha es a base de galledazos como la mayoría. Welcome to the veritable Bluefields nicaragüense. Así que sigo dejando a Moi trabajando y me voy con Matute (me equivoqué y me pasé el rato llamándole Monchito…XD) a la casa.


Acabo de empaquetar, cojo la mochila y el galón de agua, pongo el seguro por dentro y me salgo a dejarlo a la furgo. Vuelvo a por la maleta pero la puerta está cerrada. ¿Cómo? Intento abrir con la llave y me doy cuenta que se ha cerrado y el seguro está por dentro. ¡Qué bien! Ventanas con rejas, totalmente inaccesible. Por suerte andaban los carpinteros en la casa y se ponen a solucinarlo. Yo les dejo, le doy mi celular al marido de la hermana de la dra. Hodgson y me regreso al hospital. Y de camino que pasamos a buscar a Suhayra, hablamos un rato con naturalidad, bien por vos. Y tanto los carpinteros como el hombre…con vaya naturaleza que se lo tomaron..asombroso.


Tarde de ayudar a Moi, aunque él sólo más o menos se vale. Sólo necesita ayuda en momentos puntuales. Nos quedamos casi solos en el hospital y no hacemos un café y parece que el buen humor vuelve a surgir entre nosotros. Me alegro, sobretodo por él. Por cierto, que hemos hecho un pacto. Él me consigue una nevera para poner en la habitación y yo le proporciono cervezas! Jejeje! Una cosa menos de la pokito larga lista de cosillas que necesito para hacerme mía la habitación.


Moi me acompaña con Alejandro a buscar la maleta, me dejan y luego Alejandro le da un rai a Moi hasta su casa. Yo voy a la empresa médica, que la Dra. Castro me dijo que fuese a la vuelta. Y hablamos, por fin, lo tenía en mente desde lo sucedido pero no surgió el momento. Y como siempre pasa y debe pasar, sale en un nosecomo. Descanso, una puerta a la sinceridad recíproca abierta y un canal para mi liberamiento. Se fue el malestar de esta semana y para celebrarlo qué mejor que ir a cenar a casa la dra, probar la fruta de pan frita (riquísima), ver una peli y venirme a desempaquetar para mañana marcharme a San Pancho.


Me gustaría poder corlgarles estas humildes líneas hoy pero, no hay señal alguna de conectividad cósmica. Mañana será un día duro, viaje de 4h de panga ida y vuelta el mismo día.


Alguien ronca…joder, entre zancudos, calor, ronquidos y nosábanas no se si podré dormir muy bien esta noche.


No hay comentarios: